Al señor Federico de la Vega
Cuando soi un probe negro
Sin má cencia que mi oficio,
No inoro quien se merece
Acgún repeto i cariño...
Sobre mí tiene er caráter
Un particulá rominio;
Re un gallo güeno á las patas
Epongo hata er carzoncillo;...
Por un mochoroco guapo,
Y sobre guapo enstruío,
Soy capá re mocdé er suelo
Y re mucho sacreficio...
Oigame, branco, tar ve
No é bien claro lo que aficmo,
A eplicácme yo no arcanzo
Tar como un Roja Garrio...
Re toro lo grande i bello
Que er mundo encierra, no etimo
Sino ros cosa, que son
Mi jembra amá i mi arbedrío.
Re aquella ni ar Paire Etecno
Le riera un solo peacito;
Re éte sí, suelo una poca
Cerer a tar cuar amigo;
Má nunca jamá a la fuecza
Pocque soi rei re mí mimo.
Uté, branco, vecbo i gracia...
Manque en la Epaña nacío,
Puere rijponé re mí
Poc sé rojo re tocnillo...
Rígnese acetá er presente
Si ya su mérito he richo;
Fué mui rara la pecsona
A quien rí tanto cariño!...
Amo yo a la libectá
Como er pájaro a su nío;
Como la flore a la lluvia,
Como ar agua er bocachico.
E mi ley sé como er viento
Y rueño en mi hogá efertivo.
…………
En cambio re mi amitá
Solo una cosa le piro,
Conviene a sabé: que apena
Se jalle en su romicilio
Le cuente a toito er mundo
Lo que aquí en Colombia ha vito;
Riga cómo ciuraranos
Son er negro, er branco, er indio;
Cómo er señó Presirente
Usa re humirde atavíos;
Cómo en raras ocasiones,
Siendo tan libre toitícos,
Ocurre un caso que epante
Re un robo o re un hormcirio.
No orvire en su relación
Que pa sé señó Minitro
No se necesita é má
Que re cencia i re secvicios.
Eto se lo recomiendo
Pocque cuando fuí marino
Poc malo re mi pecaos,
Tuve en la Habana, i mardito
Si topé un zambo richoso
Siendo má que aquí un pollino...
Ni pure un solo momento
Hocgáme re mi arbedrío!...
Cuar eché re méno entónce
Mi humirde rancho pajizo
Jecho re la Magalena
Sobre un arto!... Allí tranquilo
Paso la vira otra güerta,
Que en mi rejtierro Rió quiso
Un colombiano eparácme
Que me trujiera a mi s’hijo,
Re lo cuale i re mi eposa,
Si güervo a ausentacme endino
Sólo será poc la efensa
Re los jueros der partío...
Tar sucucho a su mandá
Etá con suj atraitivos;
Tiene vecdura rivécsas;
Fruta que son un prorijio
Rejre la caña re azúca
Hata er coco i er caimito,
Ojalá que arguna vé
Le mire a uté entre lo mío,
Verá bien cuanto mi negra
Tiene trataimiento fino,
I cuando e felí la suecte
Der humirde campesino.
Re aquí eta tierra richosa
En tanto vario sentío...
Asiento re la iguardá,
Maire re los hombre rigno,
Re los hombre como uté,
Mochoroco a temple i jilo
Juto como la juticia
I cantó re lo rivino...
Siga, branco, i nunca ejmaye;
Re toro hai técmino fijo;
Con acte i maña se cura…
Hata er mejmo romatijmo;
Si hoi anda errante i sin patria
Manque aquí tiene su asilo,
Tac vé re hoi en poco tiempo
Güerva a calentá su nío...
Yo etuve, rije, en la Habana
Re probe humirde marino,
I me he güerto a vé en mi casa
Con mi eposa i con mi s’hijo;
Golívar, segun me cuentan,
Tamien andó peregrino,
Má tuvo való i cotancia
I Libectaró se jizo!...
——
Aunque soy un pobre negro / Sin más ciencia que mi oficio, / No ignoro a quien se merece / Algún respeto y cariño… / Sobre mí tiene el carácter / Un particular dominio. / De un gallo bueno, a las patas / Apuesto hasta el calzoncillo… / Y por un liberal guapo / Y además de guapo instruido, / Soy capaz de morder el suelo / Y de muchos sacrificios… / Óigame, blanco: tal vez / No está claro lo que afirmo. / A explicarme yo no alcanzo / Tal como un Rojas Garrido… / De todo lo grande y bello / Que el mundo encierra, no estimo / Sino dos cosas, que son: / Mi hembra amada y mi albedrío. / De aquella, ni al Padre Eterno / Le diera un solo pedacito; / De éste sí suelo una poca / Ceder a tal cual amigo; / ¡Más nunca jamás por fuerza, / Porque soy rey de mí mismo. / Usted, blanco, verbigracia… / Aunque en España nacido / Puede disponer de mí / Por ser “rojo de tornillo”… / Dígnese aceptar el presente / Si ya su mérito he dicho; / ¡Fue muy rara la persona / A quien di tanto cariño!… / Amo yo la libertad / Como el pájaro a su nido, / Como las flores la lluvia, / como al agua el bocachico. / Es mi ley ser como el viento / Y dueño en mi hogar efectivo. […] A cambio de mi amistad / Sólo una cosa le pido, / Conviene a saber: que apenas / Se halle en su domicilio / Le cuente a todito el mundo / Lo que aquí en Colombia ha visto; / Diga cómo ciudadanos / Son el negro, el blanco, el indio, / Cómo el señor presidente / Usa de humildes vestidos; / Cómo en raras ocasiones, / Siendo tan libres toditicos, / Ocurre un caso que espante / De un robo o de un homicidio. / No olvide en su relación / Que para ser señor ministro / No se necesita de más / Que de ciencia y de servicios. / Esto se lo recomiendo / Porque cuando fui marino / Por el mal de mis pecados, / Estuve en La Habana, y maldito / Si topé un zambo dichoso / Que fuera más que aquí un pollino… / ¡Ni pude una sola vez / Holgarme a mi albedrío! / ¡Cuánto eché de menos, entonces, / Mi humilde rancho pajizo / Hecho de la Magdalena / Sobre un alto!… Allí tranquilo/ Paso la vida otra vuelta, / Que en mi destierro Dios quiso / Un colombiano depararme / Que me trajera mis hijos, / y de ellos y de mi esposa / Si vuelvo a ausentarme indigno, / Sólo será por la defensa / De los fueros del partido… / Está el sucucho a su mandar, / Ahí está, con sus atractivos; / Tiene verduras diversas, / Frutas que son un prodigio, / Desde la caña de azúcar / Hasta el coco y el caimito. / Ojalá que alguna vez / Se le vea a usted entre los míos; / Verá bien cuánto mi negra / Tiene tratamientos finos / Y cuánto es feliz la suerte / Del humilde campesino. / He aquí esta tierra dichosa / En tantos varios sentidos… / Asiento de la igualdad, / Madre de los hombres dignos, / De los hombres como usted, / Mochoroco a temple y filo, / Justo como la justicia / y cantor de lo divino… / Siga, blanco, y nunca desmaye; / De todo hay término fijo. / Con arte y maña se cura / Hasta el mismo reumatismo; / Si hoy anda errante y sin patria / Aunque aquí tiene su asilo, / Tal vez de hoy en poco tiempo / Vuelva a calentar su nido… / Yo estuve, dije, en La Habana / De pobre humilde marino, / Y me he vuelto a ver en mi casa / Con mi esposa y con mis hijos; / Bolívar, según me cuentan, / También anduvo peregrino, / Mas tuvo valor y constancia / ¡ Y Libertador se hizo ! …